Cuando este hombre de Corea del Sur llegó al hospital de Seúl por sus frecuentes dolores de cabeza no sospechaba que tenía un tremendo clavo insertado en el cráneo. Los doctores creen que el objeto se le instaló en el balero cuatro años atrás en un accidente, sin que él lo advirtiera.
Debido a la ubicación y la orientación del clavo dentro de la cabeza del hombre, los médicos pudieron retirarlo sin problemas y aseguran que la recuperación será completa. Según la declaración de personal del hospital, este señor -cuya identidad no fue revelada- "no podía creer el motivo de su pertinaz jaqueca".
A pesar de lo increíble de la situación, ni siquiera se acerca al caso de Isidro Mejía quien sobrevivió a un accidente en una construcción en California donde se le instalaron ¡seis! clavos dentro del cráneo.